El rol de los animales de compañía ha cambiado mucho en los últimos tiempos. Han pasado de simples mascotas a, prácticamente, ser un miembro más de la familia. Este es el motivo por el que, cada vez más, los dueños de mascotas buscan proporcionar a sus fieles compañeros los mejores cuidados y, para ello, suelen recurrir a un seguro.
La cuestión es qué tipo de seguro queremos para nuestra mascota. Podemos distinguir tres modalidades genéricas que ofrecen coberturas diferentes: seguro de responsabilidad civil, seguro de accidentes y seguro veterinario. A partir de estas tres, se pueden encontrar productos que incluyan coberturas de dos o de las tres modalidades.
La garantía de responsabilidad civil cubre los posibles daños que el animal pueda causar a terceros. No olvidemos que la legislación española responsabiliza al propietario de los daños que pueda causar el animal. Con frecuencia, los seguros de hogar incluyen esta cobertura, aunque, dependiendo del tipo de mascota, podría ser conveniente una póliza específica con límites más elevados.
El seguro de accidentes cubre la asistencia veterinaria y los gastos del tratamiento por lesiones derivadas de un accidente, pero no cubre el tratamiento de enfermedades.
Por su parte, el seguro veterinario funciona como un seguro de salud y garantiza la asistencia tanto en caso de enfermedad como de accidente, aunque suele excluir los tratamientos preventivos como las vacunas, desparasitaciones o esterilizaciones.
En la actualidad, muchos dueños de mascotas buscan tener las coberturas más completas. Estas son algunas de las claves para encontrar el mejor seguro:
- Que incluya la cobertura de responsabilidad civil por los daños personales o materiales que pueda causar la mascota.
- Que cubra el acceso ilimitado a aquellos tratamientos veterinarios que contribuyan a garantizar la buena salud del animal.
- Comprueba si existe algún periodo de carencia durante el cual no se pueda acceder a los servicios veterinarios incluidos en la póliza.
- Que preste atención a si se incluyen algunas exclusiones que limiten el alcance de la cobertura.
- Que valore la existencia de servicios adicionales incorporados al seguro, como el asesoramiento veterinario telefónico. Muchos seguros incluyen en sus prestaciones servicios como revisiones periódicas, consultas veterinarias de urgencia 24 horas, acceso a especialistas o a las vacunas que necesite.
A veces, se tiende a basar la elección del seguro para nuestra mascota solo en el precio, buscando el más barato. Pero la realidad es que el coste del seguro más o menos elevado suele estar relacionado con el número de coberturas. A más coberturas, más caro será la póliza (aunque también influyen otros factores, como la raza del animal o su edad). Por ello, hay que valorar cuál es el presupuesto que tenemos disponible y qué garantías se desea contratar para asegurar el bienestar de nuestro animal de compañía.
Consulte a su corredor Quality Brokers sobre las opciones de seguro que más le convienen para su mascota.